martes, 24 de noviembre de 2009

my first little pines

microsesion 221109 from lujo berner on Vimeo.


Cosas del destino y del azar. Casualidades de la vida, la mami de mi hija cuenta con una camarita recién estrenada para grabar las primeras sonrisas y balbuceos de nuestra "baby" y resulta que la misma, a parte de grabar en HD es waterproof... qué cosas, ¿no?. Este es mi primer video acuático con esta cámara, que ya se que no es gran cosa; pienso que la cámara será mas útil grabando a terceros que en esta improvisada aplicación como cámara subjetiva (sujetada a pulso con la mano, como se puede apreciar en las multiples vibraciones y traslaciones no deseadas sobretodo en la parte puramente windsurfera), pero el cielo azul, la belleza extraterrestre del cabo, el libertinaje onanista del slalom en solitario y la vuelta a casa en el ocaso anaranjado estan presentes... esto promete... o eso creo. Eso si, voy a necesitar renovar mi portátil o trabajar desde otro sitio, porque de momento lo de editar el video en HD ni pensarlo. Ya veremos.

Otra cosa, recontando los votos para el calendario (por cierto, solo hemos votado Andersson and me) y descartando las que no tienen nigun voto, las fotos que quedan son estas:



2 votos

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1 voto
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1 voto
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por supuesto esto no quiere decir nada, ya que es posible añadir aún fotos y elegir las que aún no han sido votadas (link), pero algo es algo. Seguimos.


...

miércoles, 18 de noviembre de 2009

calendario 2010

Queramos o no, parece que irremediablemente el año va terminando, así que llega el momento de hacer balance y otras cosas.

El año pasado, precipitadamente eso si, el jaimo y yo nos curramos un calendario para regalar a nuestros allegados en la fiestas. En ese calendario se recogían las fotos, que a nuestro entender, resumian en imagenes lo que había deparado la temporada. Despues del gran éxito de crítica y público del citado calendario, pues este año la intención es volver a repetir pero, eso si, contando con vosotros, centauros y no centauros, para la elección de las fotos. La propuesta es sencilla, proponer fotos para cada uno de los meses del año: via mail, via comentario, lo que queráis.

Lo único malo que este año ha sido bastante malo y yo, por ejemplo, hay meses que no tengo ni fotos y si las hay pues tampoco son gran cosa. En fín os dejo una recopilación rápida que he hecho a modo de propuesta, a ver que os parece:



En princio debrían ser fotos a cuyo fotógrafo no le importe el uso de su obra y cuyo tema tenga relación con el mundo centaúrico espumoso. En cualquier caso estamos abiertos a cualquier posibilidad. Gracias a todos.

martes, 10 de noviembre de 2009

winter

Photobucket


Ahora que si que parece que llega el invierno - o por lo menos el otoño- a esta orilla del mundo, conviene recordar que a parte del frio, de tener que volver a usar el traje largo y de la brevedad de los días ,esta época del año tiene su aquel. Las puestas de sol flamígeras, el verdor calblanquiano y las buenas sesiones de surf mediometrista y cristalino (como en la foto de Javi Ortega del enero pasado y que por cierto no sabía ni que existía) son algunas de las señas de esta estación.

Pensando en la sesión de la imagen y en estos últimos dias en los que el viento volvió a nuestras vidas la verdad es que no me da ninguna pereza, mas bien lo contrario, de que llegue el invierno.

Por cierto, la prueba del algodón esta de vuelta una vez mas, ¿cómo reconocer a un windsurfer pillado en flagrante delito de surf sin vela?...

jueves, 5 de noviembre de 2009

thruster

Que ganicas de probarla. Ay. Que ganicas.
Quizás este fin de semana...




lunes, 2 de noviembre de 2009

El aliento de Dios

Casi 30 años han pasado desde la primera vez que me subí a una tabla a vela, y aún así, siguen apareciendo momentos de excitación difíciles de explicar...

Una Primera Silenciosa, así se titulaba el primer libro de corte ecologista escrito por Rachel Carson en 1962. En él se relataba la incidencia que los nuevos productos químicos estaban causando en el medio ambiente. Tóxicos que estaban provocando un deterioro ambiental de manera silenciosa, al mismo tiempo que erosionaban la biodiversidad del planeta. Pues eso precisamente es lo que ocurrió esta primavera de 2009. Un vacío silencioso, una ausencia de valores elementales; llámense ilusión, chispa, emoción, vitalidad,... Provocada, no por agentes tóxicos, si no por ausencia de dos grandes elementos: el aire y el agua, expresados en su más enérgica morfología: el viento y las olas.

Esta ausencia estaba generando una erosión crónica sobre mi aura, y al igual que en el libro de Carson, una pérdida de vitalidad, de mi vitalidad.

Tras un verano donde pude recuperar algo de aliento en una escapada lusa y en un milagro de 3 días calblanquiano, llegó el otoño también silencioso. Pero esta vez, unido a la pérdida de luz y predisposición depresiva inherente a la estación del autumnum, provocó un caos emocional en mí sin precedentes.

Y por cosas del destino, o no..., se produce una conjunción de astros en la punta más meridional de la península ibérica, provocando una especie de canto de sirena que me embauca hasta allí como si no existiese nada más en el mundo.
Después, la gloria. Imágenes imborrables se me presentan; líneas paralelas en el horizonte peinadas por el viento como cabellos de ángel. Mezcla cromática de verdes y azules. Una reacción química en el estómago remueve mis entrañas y empieza a segregar agua de mar por mis venas.

Poco a poco mi cuerpo fluye con las olas, descubro un nuevo windsurfing. Se mezclan muchas sensaciones: velocidad, respeto, admiración, felicidad, emoción, tensión, esfuerzo, decisión, intención, satisfacción, perplejidad,... Una especie de embriaguez relaja mi cuerpo y calma mis males. Con el ocaso, llega la euforia, un poco la locura. Las olas se hacen más enormes y el viento las acaricia más suavemente, creando un dulce roce tangencial haciendo que la tabla hunda el canto de una forma pura y deje los límites en manos (en este caso en los pies) del gobernante. Puro surfing, pura velocidad, pura vida.

Mi alma estaba pletórica, pero aún quedaba hueco para otra sesión más al día siguiente.

En el nuevo día, el viento soplaba más fuerte y las olas eran algo más perezosas, pero confiaba en algo, no sé en que. Y ahora lo sé. Descubrí otra dimensión en el windSURFING, bueno en realidad descubrí dos cosas,...

Una vez deslizándome hacia lo nuevo y "secreto" empiezo ya intuir qué me deparará el día. Una roca negra y puntiaguda se me presenta ante mí muy educada, y una lengua de arena hace lo propio deslizándose desde el verde pinar hacia el azul mar. Mágicamente éste empieza ondularse con 3 o 4 jorobas que van creciendo hasta desplomarse poco a poco. La cuestión está en qué joroba montarse y cuándo pedir permiso a la gran roca madre para que te permita acompañar las olas mientras rompen el cristal.

Ritmo, esa es la clave, la pieza que descubrí en aquel lugar. La música que interpretaba aquella situación requería de acompañamiento. Una música celestial que debías de aprender a escuchar. Bottom-cut, bottom-cut, bottom-cut,... esas eran las notas. El ritmo lo ponías tú, pero casi siempre coincidía con el ritmo de tu corazón. Y de repente, el aliento. Ese chorro de agua expulsado cuando el canto de la tabla corta el cristal líquido. En el momento en que tu exhalación conjuga con ese momento, lo has encontrado, es el aliento de Dios.

Por Óscar